viernes, mayo 28, 2010

FELIX HUAMAN PROFESOR EMÉRITO DE LA UNE


LA SONRISA DEL CORAZÓN O LA FIESTA POÉTICA DE FÉLIX HUAMÁN CABRERA.
(Un homenaje a la literatura) *


“... A estas alturas lo andino ya no requiere tantos discursos, lo andino, por su propia fuerza está penetrando en la cultura del país. Lo andino se está difundiendo en todas las ciudades, tal vez, con alguna excepción en algunos lugares tradicionales, cosmopolitas.” (Manuel Baquerizo)

Muchas veces el silencio y el olvido son dos persistentes maneras de no reconocer la valía de las personas. Un país como el nuestro acostumbrado a reconocer tardíamente a sus escritores, sus poetas, y a sus maestros verdaderos debería hacerlo en el momento oportuno y en la plenitud de vida de estos y no acostumbrase a rendir homenajes necrofílicos ni “reconocimientos” a destiempo. Es por ello, que hoy deseo que mis palabras cumplan la función de "leer" hasta donde me sea posible la imagen de Félix Huamán Cabrera cuyo trabajo y constancia de vida en favor de la literatura es para muchos de los que hemos tenido la suerte de ser sus alumnos haber aprendido a ser fieles y amorosos con la literatura. Hemos aprendido a desarrollar ese amor comprometido y sin claudicaciones en torno a la literatura que es la vida misma.
Tenerlo como profesor fue una suerte que me permitió “aprender lo que significa la amistad franca y sincera”. Aprender la importancia de lo que es leer un buen libro de cuentos, una voluminosa novela, o poemas de diversos registros. Hoy lo recuerdo fabulando en cada clase con su peculiar estilo, con esa forma conversacional, llena de sonrisa corazonada que caracterizaba sus clases. Hoy lo veo con su mirada serena tras esos vidrios azules regalándonos el universo verbal de la literatura.
Hoy deseo rendir un tributo personal como muestra de aprecio y amistad sincera a quien ha traducido en su escritura aquello que Gonzalo Portocarrrero define como “... un “tejido simbólico” o “red de significaciones” que crean un cosmos, un sentido; allí donde de otra manera reinaría el caos y el absurdo. Conocer la cultura del otro hace posible comprender su racionalidad. Y también lo arbitrario y contingente de nuestro propio punto de vista.” Es decir, la literatura, el mundo de las letras, el espacio de los poetas, narradores y dramaturgos. Es de ese concepto que Félix Huamán forma su literatura, su espacio narrativo y poético. Huamán siempre inculcaba la idea de que un hombre se hace culto libre y moralmente con la lectura. Una lección que hsta hoy no olvido ni olvidaré. Por que, hay que entender que sin cultura cualquier esfuerzo del hombre es inexistente para gobernar y ser gobernados: Por que sin cultura, sin letra no seremos capaces de formar un hombre pleno que deje a un lado el egoismo, el cinismo y otras lacras que dañan su alma: Por que sin arte, sin ciencia no hay hombre libre. Por eso se hace urgente entender que la cultura no puede ser la última rueda del coche y menos en una institución universitaria. De ahí la apuesta en la permanencia de los libros y su necesaria lectura que recomendaba, recomienda y recomendará Félix.
Esta es una idea que aprendí de la amistad con Félix y por que no también aprendí a buscar utopías como es la de buscar con urgencia la mejora en la educación y la cultura para hacer de nuestra patria un territorio lleno de esperanzas y posibilidades en el futuro sin odios, ni violencia.

Hoy quiero relatar brevemente que leí por primera vez un libro de cuentos de Félix Huamán Cabrera (Canta, 1943) el año 81 cuando iniciaba mi carrera universitaria, el libro llevaba un título mágico Agomayo: Río de Arena que agoté de punta a punta y realmente quede impresionado por lo que ahí se contaba ya que el universo mostrado me resultaba familiar por ser yo también de esos que algunos llamaban despectivamente serranos. En fin, mula de candela, el toro que se perdió bajo la lluvia, plumas de otro ser, agomayo eran cuentos que me resultaron familiares porque se convertían el la prolongación de mis recuerdos provincianos. Me llamó la atención que no era el único sorprendido por esos cuentos ya que Claudio, Julio, Manuel, Lucho también estaban eufóricos tanto así, que esa tarde con dos cervezas bien heladas pusimos en juego nuestras incipientes armas como “críticos literarios” ante ese libro que habíamos leído. Recuerdo que me llamó la atención unos relatos donde se relataba el proceso de la migración esos cuentos eran: De Carhua nos venimos, mi Huaros querido, relatos donde se contaba el éxodo de los provincianos por llegar con todas sus ilusiones a Lima la Horrible y pelear dentro de ese inmenso muladar por un pedazo de tierra y labrarse un futuro. A mi criterio aquí hallaba un escritor que no se contentaba con mostrar la vida dura de los migrantes sino mostraba desde la escritura la lucha cotidiana que éstos debe emprender para hacerse de un patria y un sueño como nuevos limeños. Más adelante, pude leer sus libros: Agua encanta,Por la nieve habían venido, Candela Quema Luceros, Noche de relámpagos, Caballo verde en copa de oro, Pájaro sin alas, el Pedregal de Yanamé, y en la espigas de Junio, Sierpe de acero y soles de oro, Qantu flor y tormenta. Pasaban los años y nuestra formación universitaria culminaba el año 87. Nuestro trabajo en la docencia comenzaba en Nueva Esperanza y Villa María del Triunfo. Pero lo curioso es que nunca me desvinculaba de la universidad a la que regresaba de vez en cuando. Una vez ahí, visitaba al maestro Félix quien cordialmente seguía con la misma sencillez de la amistad fraterna. Será años más tarde, cuando asistí a la ANEA en el jirón Puno del Cercado de Lima que volví a ver al amigo profesor y en una inusitada charla me invitó a trabajar en condición de profesor contratado en el ciclo de verano de la Cantuta. De ahí, mi agradecimiento infinito al profesor Félix por ese gesto que me permitió años más tarde ingresar mediante concurso de cátedra a esta Casa de Estudios.

Pero volviendo al hilo de mi narración diré que pasado el asombro inicial de lectura de Agomayo continuamos nuestra formación en nuestra especialidad que era literatura. Con los amigos del H1 literatura que hoy deben andar dispersos por Colegios, universidades ya en el Perú o en el extranjero convertimos nuestra aula en un taller de lectura permanente y fueron llegando otros autores que contaban las cosas de manera tan familiar que para algunos de nosotros se convertía en retos que hasta hoy nos persigue así llegaban: José María Arguedas, Manuel Scorza, Eleodoro Vargas Vicuña, Carlos E. Zavaleta, Porfirio Meneses, Marco Yauri Montero, Edgardo Rivera Martínez, Oscar Colchado y otros autores de otra vertiente pero tan familiares como: Oswaldo Reynoso, Miguel Gutiérrez, Mario Vargas Llosa, Gregorio Martínez, Antonio Gálvez Ronceros, José Antonio Bravo, Julio Ramón Ribeyro.

A partir de ese descubrimiento inicial junto a la lectura que nos inculcaba desde su magisterio de escritor fue también apareciendo leer al otro Félix Huamán aquel vinculado a su labor pedagógica, no sólo en la cátedra sino en sus propuestas educativas. Así tuve la oportunidad de consultar : La composición poética (métodos y técnicas de su aprendizaje en educación primaria y secundaria), Pautas metodológicas para la enseñanza- aprendizaje de la literatura peruana (dos ensayos), la enseñanza- aprendizaje de la redacción (el método de la función sintáctica en la composición) La composición narrativa ( métodos y técnicas en de su aprendizaje en educación primaria y secundaria)Valle corazón azul, Junín y sus lecturas, Wuankamayo, Textos caracterizados por su didactismo, trabajados como lecturas de fácil aplicabilidad en el nivel educativo. Textos que van desde relatos orales, poemas, crónicas, artículos de costumbre, artículos de historia regional, técnicas literarias de composición y creatividad, propuestas metodológicas para la enseñanza de lengua literatura, etc.
Por otro lado también descubríamos otro filón importante en el trabajo de Félix Huamán esta vez orientado a la difusión y conocimiento de la literatura peruana (como propuesta didáctica) ahí esta la edición de once pequeños tomos que muestran el origen y desarrollo de la literatura peruana, pasando por la identificación y actualidad de la literatura peruana hasta la literatura peruana última. Textos complementarios a los textos del nivel secundario que también ha publicado para todos los grados de secundaria.
Un hecho singular ocupa la vertiente que lo vincula a la literatura llamada infantil y juvenil donde el autor ha escrito: El toro que se perdió en la lluvia, Silbido en el maizal, Los niños de barro, Becerra encantada y la pasña del puquial, Altamar, Ciro Jilguero e incluso algunos relatos de su libro caballo verde en copa de oro, de pájaro sin alas. Y como olvidar su pequeño y hermoso libro de poesía: Del amor y sus días. Se que tiene dos libros de poesía inéditos. Es decir, nuestra admiración crecía como el torrentoso Agomayo que se duplicaba en fuerzas que nos arrastraban a leer la producción de Félix Huamán.

Hoy Félix Huamán Cabrera es un autor en cuya piel se ha pegado la tierra. Se ha cicatrizado la forma de mirar y sentir lo andino. En la totalidad de sus libros se da la afirmación de una escritura auténtica, una voz que viene de la tierra y se hunde hasta la médula de su raíz y de ahí, de esa pakarina es donde nace sus palabras como metáforas de una vigorosa identidad terrígena que circula como poesía pura en sus libros. Félix Huamán es la clara muestra de una lección permanente que cesa de pintar con ternura y la pasión la vida y la literatura que aún nos onubila. De ahí, que con emocionada escritura adolescente, he querido tejer en estas páginas recuerdos, risas sueños, viajes de mi etapa universitaria como alumno y mezclarlas con el rumor de las clases de literatura de Félix Huamán, con su amistad honesta que me ha brindado y que hoy me ha permitido cultivar su amistad como una extraña flor de arco iris.


* Texto leído en la ceremonia de entrega del título honorífico de Profesor Emérito al escritor Félix Huamán cabrera. (27 de mayo UNE - La Cantuta)


martes, mayo 11, 2010

JESÚS CABEL Y SU MURAL DE POESIA PERUANA


Mural bibliográfico de la poesía peruana siglo XX, (Lima, Edición de la Asamblea Nacional de Rectores, 2009. 447 pp.), de Jesús Cabel Moscoso es una invalorable contribución a los trabajos de registro bibliográfico que se han elaborado en nuestro país. La importancia de dicho material resulta de consulta imprescindible y de obligatoriedad académica para quienes desean estudiar de manera “seria y objetiva” obras, autores, épocas, revistas o cualquier manifestación literario-cultural por la que discurre nuestra heterogénea literatura peruana y dentro de ella la poesía.
Los registros bibliográficos, guías, diccionarios crítico-bibliográficos, índices o bibliografías temáticas resultan una herramienta básica para la investigación literaria para los “estudiosos, críticos literarios, docentes de literatura, creadores” y porque no, para toda persona que quiera interesarse en los asuntos de literatura. No se podría iniciar ningún juicio “sugerente y decoroso” sobre un autor y su obra, o sobre una periodo literario a nivel de ensayo o de una tesis de grado si no se cuenta al menos con un “indicio” inicial sobre la bibliografía sobre el autor de quien se desea escribir, aunque esta afirmación es relativa cuando sólo se desea “reseñar” a nivel informativo o realizar una apreciación didáctica “en los lineamientos de una seudocrítica complaciente” a la que nos tiene acostumbrados algunos pontífices literarios.
Ya en el plano de la relevancia de las guías bibliográficas me atrevo a señalar que estas pueden dividirse en seis grandes tipos a saber:
a) Guías bibliográficas de conjunto o de concepción totalizadora, textos que se inclinan por organizar las entradas bibliográficas atendiendo una mirada global a las expresiones literarias de un continente o de un país por ejemplo: El repertorio bibliográfico de la literatura latinoamericana dirigido por Luis A. Sánchez y encargada por la Universidad de Chile hacia 1953, trabajo proyectado en 5 partes con un total 17 tomos que comprendería historia y crítica generales, antologías, historia y crítica nacionales, antologías nacionales, individuales, novelas, ensayos, poesías, cuentos, teatro, temas generales (por Ejemplo: el mar, la sierra. El indio, el negro) traducciones de idiomas extranjeros al castellano por americanos, traducciones de obras americanas a idiomas extranjeros. Otro ejemplo es la bibliografía fundamental sobre literatura Española de Francisco Muñoz Marquina (2003).
b) Guías bibliográficas específicas que atienden una mirada de conjunto a las expresiones literarias de una país por ejemplo: Bibliografía peruana de literatura 1931-1958 de Alberto Tauro (1959), Contribución a la bibliografía de la literatura peruana por Yolanda Rodríguez de Westphalen, Willy Pinto Gamboa, Víctor E, Díaz Guzmán y Rodolfo Cerrón Palomino (dirigido por LAS, 1969) El Perú y su literatura de Miguel Ángel Rodríguez Rea (1982) Guía bibliográfica de la literatura peruana de Jorge Puccinelli (1954) A tentative biblography of peruvian literatura de Sturgis E. Leavitt (1932) aquí también, se podría considerar a bibliografías específicas sobre una determinada época literaria por ejemplo: Poesía peruana del siglo XX (I 1901-1920) de Miguel A. Rodríguez Rea, A Bibliography of Spanish American literatura de Alfred, Coester, Contribución a la bibliografía de la poesía peruana (1915-1950) de Luis Monguio (1954)
c) Guías bibliográficas especializadas que atienden una mirada de conjunto a las expresiones literarias a partir de los géneros (poesía, novela, cuento, ensayo etc.) aquí ubicamos los siguientes trabajos: Bibliografía de la poesía peruana (1965-1979) Bibliografía de la poesía peruana (1980-1984) de Jesús Cabel, Bibliografía de la novela peruana de Elsa Villanueva de Puccinelli (1969) Mural bibliográfico de la poesía peruana siglo XX de Jesús Cabel (2009) Bio-bibliografías peruanas. Nómina provisional de Enrique Carrión Ordoñez (1970).
d) Guías bibliográficas que asumen un valor de diccionario bibliográfico como por ejemplo: El diccionario Manual de literatura peruana y materias afines de Emilia Romero del Valle (1966) Diccionario crítico bibliográfico de la literatura peruana de Miguel Ángel Rodríguez Rea (2008)
e) Guías bibliográficas de revistas por ejemplo: Índice de la revista Letras (1929-1954) de Daniel Valcárcel, Índice del Mercurio Peruano (1918-1978) de César Pacheco Vélez (1988), Índice acumulativo de la revista Amauta de Violeta de Guerra-García, Guía de la revista Cantuta (1968-1988) de Gabriel Lostanau Rubio (1990) Índice de la Revista de Crítica Literaria latinoamericana (1975-1999) de Ricardo Kaliman (2003)
f) Guía bibliográficas sobre el autor y su obra por ejemplo: Introducción bibliográfica de César Vallejo de David Sobrevilla (1995) Bibliografía analítica y anotada de y sobre Martín Adán (1927-1974) de Hubert P. Weller (1975) aproximaciones a la bibliografía de Blanca Varela de Patricia Colchado Lucio (2002) bibliografía de y sobre Manuel Scorza de Friedhelm Schimidt (1991) Bibliografía de y sobre José María Arguedas de Carmen Alemany Bay (1992)
g) Las guías hemerográficas una de las menos trabajadas en nuestro país aquí encontramos como referencia el texto: Tradición oral peruana (hemerografía 1896-1976) de Irma Chonati, José cerna Bazán, Santiago López Maguiña, Miguel A. Rodríguez Rea (1978)

Volviendo al importante trabajo de Jesús Cabel quien transita el campo de la investigación con solvencia admirable desde sus importantes trabajos en el campo de la literatura infantil, su labor de antologador y difusor de nuestra literatura en diversas revistas internacionales, su trabajo de ensayista especialmente en su libro Fiesta Prohibida (apuntes para una interpretación de la nueva poesía peruana 60/80, sus hallazgos en torno a César Vallejo, Abraham Valdelomar, su labor poética en sus libros: Cruzando el infierno, Crónicas de condenado, Arca de Papel, ácido. Y un trabajo de compilador agudo y puntilloso en sus trabajos de bibliografía de libros de poesía peruana ya en sus ediciones del año 80 y del 86. Trabajos fundacionales que ponían atención en la variopinta publicación de libros de poesía que se realizaba no sólo en Lima, sino también en las diversas ciudades del interior de nuestro país. Se sabe que un poeta al iniciar la edición de su primer libro a veces sólo edita 500 ejemplares y muchas veces su circulación es nula por lo que muchas veces no se tiene lectura, noticia, ni registro del mismo. Es quizás, en ese vacío que surge el trabajo del bibliógrafo quien se toma el trabajo de realizar el asiento bibliográfico con la cual queda registrado “el dato” para iniciar la “investigación si fuera el caso”. Cabel en esa perspectiva ha ampliado sus trabajos iniciales para darnos un ambicioso trabajo que titula: Mural Bibliográfico de la poesía peruana (siglo XX) revisado el texto esta nos entrega 4014 entradas bibliográficas centradas en darnos a conocer libros y autores que mostrarían en sus trabajos el “mural heterogéneo de la poesía peruana” llama la atención el pluralismo en el registro bibliográfico. Producto de la labor de investigación de Cabel quien a no dudarlo debe poseer la mayor y más rica bibliografía información sobre libros de poesía peruana a la que hoy podemos acceder a través de este libro. Por otro lado, nos entrega 300 asientos bibliográficos sobre antologías literarias con la cual se acrecienta el valor del texto que estamos comentando. Mención aparte es el índice onomástico de autores que facilita la búsqueda de la ficha bibliográfica. Y como para graficar mejor su trabajo Cabel nos entrega un importante álbum de fotos de algunos autores emblemáticos de nuestra poesía peruana. Sin lugar a dudas el mural bibliográfico de Cabel será un material de consulta obligada para poetas que quieran conocer su tradición poética, para investigadores y críticos que deseen enjuiciar y comprender mejor la poesía peruana, para profesores de literatura que desean estar bien informados. El Mural de poesía los espera en su multiplicidad rica y orgánica.

sábado, mayo 01, 2010

CARLOS GARCIA MIRANDA Y UTOPIA NEGRA


Leyendo los diarios de circulación masiva que a veces no traen más que noticias de asquerosa corrupción donde se pierden expedientes, se borran archivos electrónicos, o nos muestran los rostros leprosos y cotidianos del cinismo de los políticos comprometidos en “aceitadas” y “faenones” imposible no buscar algo que nos lleve al sosiego de la cultura literaria. Así me entero que el Fondo Editorial de la Facultad de Letras de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos acaba de editar UTOPÍA NEGRA (2010) un estudio sobre la obra narrativa de Antonio Gálvez Ronceros, escrito por Carlos García Miranda. Libro que forma parte de una serie breve y solvente en la que se han publicado los trabajos ensayísticos de: Camilo Fernández Cozmán (La soledad de la página en Blanco, 2005) Miguel Ángel Huamán ( Siete estudios de interpretación de la literatura peruana, 2005) Porfirio Mamani Macedo (La sociedad peruana en la obra de José María Arguedas, El Zorro de arriba y el Zorro de abajo, 2007) y realmente la noticia de que hay un nuevo libro que estudia la narrativa de Gálvez Ronceros me motiva buscar el libro para leerlo y visualizar la lectura que aporta García Miranda. Habrá que visitar el patio de letras o ubicar al “buen Carlitos” hay mucho interés en leer este libro y usted estimado alumno que a veces me lee y le toca investigar este autor ya sabe a buscar este libro.